El Corazón
1) El Corazón gobierna las redes y canales de los cinco órganos, dirige los movimientos de las cuatro extremidades, hace circular el Qi y la Sangre, recorre los reinos de lo material y de lo inmaterial, y se encuentra en sintonía con los portones de entrada de cada acción del cuerpo. Por consiguiente, intentar gobernar el flujo de energía en la tierra sin estar en posesión de un <<Corazón>> sería como aspirar a afinar un gong o un tambor sin tener oídos, o como intentar leer una obra de literatura sin tener ojos.
Del clásico Taoísta, Contemplaciones de los Maestros Huainan (Huainanzi), fl.110 antes de nuestra era.
2) El Corazón es el emperador del cuerpo humano y sus oficiales subordinados están a cargo de los nueve orificios y sus funciones respectivas. Siempre y cuando el Corazón se mantenga en el camino correcto, los nueve orificios le seguirán y funcionarán apropiadamente. Si el deseo se vuelve excesivo en el Corazón, sin embargo, los ojos perderán el sentido del color y los oídos el sentido del sonido. Por lo tanto, se dice: <<Mantén tu Corazón vacío – es este el arte del Corazón a través del cual los orificios pueden llegar a ser dominados>>.
Si arriba se desvía, abajo funciona mal. No hagas correr a tu Corazón como a un caballo, o de lo contrario extinguirás su energía. No hagas volar a tu Corazón como a un pájaro, o de lo contrario lesionarás sus alas. No mueves las cosas de un lado para otro de manera frenética sólo para ver que sucede. Si mueves las cosas de un lado para otro, las descolocas. Si te mantienes en calma y eres paciente, toda vendrá a ti por si mismo.
El Tao no está nunca demasiado lejos, sin embargo puede resultar difícil alcanzarlo. Se encuentra dentro de cada uno de nosotros, sin embargo puede resultar difícil de captar. Si mantenemos los deseos a raya, el shen entrará en su morada. Los seres humanos anhelan la inteligencia y la sabiduría, pero pocas veces intentamos comprender cual es la fuente de la existencia. El sabio no busca nada, por lo tanto de manera natural alcanza el estado de comprensión y vacuidad.
Del clásico Taoista, Guanzi, anterior al año 200 antes de nuestra era.
3) El Corazón es el maestro del cuerpo y el emperador de la red de órganos. Por un lado está el corazón como estructura hecho de sangre y carne: este tiene la forma de una flor de loto cerrada y se encuentra por debajo del pulmón y por encima del hígado. Y por otro lada está el Corazón resplandeciente de espíritu-shen, el cual engendra Qi y Sangre y por consiguiente es la raíz de la vida.
Es la fuente de todas nuestras partes y funciones corporales, y si embargo no se manifiesta en colores o signos evidentes. En el preciso momento que quieres definirlo y dices <<aquí está>>, éste desaparece; pero cuando te olvidas de él completamente, sin embargo, éste se coloca más cerca de ti que nunca. Es por esto que se le llama <<el espíritu vacuo>>. A pesar de su naturaleza escurridiza, el shen dirige cada acción y parte de nuestro cuerpo. La forma y el shen resplandeciente se deben entender como dos partes interdependientes, y debemos entender que los trastornos del corazón material son siempre causados por emociones desequilibrantes, tales como la depresión, la ansiedad, las obsesiones o la tristeza, las cuales abren el camino para que penetren los agentes patógenos nocivos.
Li Ting, Libro Elemental de la Medicina (Yixue Rumen), 1575.
La persona sabia ve su cuerpo como un país: el Corazón es el Gobernante ; el jing (esencia yin material) y el Qi (función yang inmaterial) son los ciudadanos. Si el corazón no abusa de su poder, si se mantiene centrado y enfocado en los asuntos esenciales, el jing entonces florece y el Qi se torna estable, los intrusos serán siempre repelidos, las arcas estarán llenas y cada parte del paisaje corporal será luminoso y pacífico.
Li Yuheng, Desplegando la Alfombra con Palabras Iluminadas (Tuipeng Wuyu), dinastía Ming, alrededor del siglo 16.
5) Cada uno de los doce canales sigue los dictámenes del Corazón. Por lo tanto, el Corazón es el Gobernante de las redes de los órganos. Su punto cardinal es el sur, su estación el verano y su naturaleza es la del fuego. Consecuentemente, el Corazón representa el principio conocido como <<el fuego imperial del cuerpo>> (jun huo). Su relación con los otros órganos es jerárquica; no sólo los doce canales sintonizan su Qi (funciones) con las directrices del Corazón, sino que además ofrecen todo su jing (esencia material) como tributo para nutrirlo.
El Corazón es por lo tanto la raíz de l vida, la base del shen, el maestro de la Sangre, el comandante de los vasos. Este posición privilegiada se debe a la omnipresencia del shen: el shen reside en el Qi y el Qi reside en el jing. Sólo el jing del Corazón es eternamente abundante, lo que le permite enviar shens subordinados a los otros órganos zang. Sólo el Qi del Corazón está siempre en abundancia, lo que le permite extraer el jing corporal y repartirlo a los seis órganos fu. Son estas las principales funciones del Corazón.
El Corazón está conectado al Riñón y lo clásicos nos dicen: <El Corazón reside en los vasos. El Corazón gobierna la red del Riñón no a través de una posición de control en el ciclo restrictivo (donde en realidad es el Riñón el que modula y contiene al Corazón), sino porque es el maestro superior de las redes conectivas de todos los órganos. Antes de que el fuego del Corazón se puede mezclar de manera armoniosa con el agua del Riñón, debe haber suficiencia de agua del Riñón. De otro modo, el fuego del Corazón se descontrolaría y todo tipo de trastornos y desequilibrios de Riñón y Corazón se sucederían>.
Medicina China Clásica 社區針灸
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