La sexualidad
es de gran importancia dentro del Taoismo ya que se entiende que su
"correcta" practica ayuda a preservar e incrementar la energia vital,
incrementada a traves del control de la eyaculacion y la inyaculacion, y por lo
tanto acerca al hombre a su inmortalidad. Esta seccion repasa brevemente la
historia de la sexualidad y el sexo taoista, las antiguas recomendaciones sobre
cuando tener relaciones sexuales, la inmortalidad y la sexualidad en el
taoismo, asi como un comentario sobre el presente auge de las tecnicas sexuales
taoistas en el mundo.
Historia
Historia
Algunas sectas durante la Dinastía Han llevaban
a cabo encuentros sexuales como parte de las prácticas espirituales derivadas
del Tao (Heqi) Los primeros textos que han llegado hasta nuestros días tratando
este particular se encontraron en las tumbas de Mawangdui. Aunque el Taoismo
todavía no se había desarrollado plenamente como filosofía en la época, estos
textos compartían un asombroso número de coincidencias con algunos más tardíos
de la Dinastía Tang, tales como el Ishinpo. Las artes sexuales hipotéticamente
alcanzarían su cumbre entre el final de la Dinastía Han y el de la dinastía
Tan. Después de los años 1000 dc, el puritanismo Confucionista se fue haciendo
fuerte, llegado el punto en que, durante la Dinastía Qing el sexo se convirtió
en un tema tabú en la vida pública. Los confucionistas argumentaban que la
separación de género en la mayoría de las actividades públicas y sociales
databa de 1000 años antes, y se decidió suprimir “el arte sexual”. Debido a
dicho tabú, existió una gran censura durante la Dinastía Qing en lo referente
al sexo, principalmente en la literatura. Como resultado, algunos de los
tratados de la época que trataban el tema en profundidad solo sobrevivieron en
Japón.
Antigua Práctica
Qi (Fuerza de Vida) y Jing
(Esencia)
La base del pensamiento taoísta es que Qi es una
parte de todo lo que existe. Está relacionado con otra sustancia energética
encontrada en el cuerpo humano conocida como Jing, la cual, una vez utilizada
de manera completa, conllevara la muerte. El jing puede perderse de varias
maneras, principalmente a través de los fluidos corporales. Los taoístas ponían
en práctica varios métodos para estimular, incrementar y conservar sus fluidos
corporales, llegando hasta el punto de, algunos de ellos, reciclar sus heces.
El fluido que contenía una mayor proporción de Jing es el semen del hombre, por
lo tanto, los taoístas creían que el hombre debía reducir la frecuencia con la
que eyaculaba hasta ciertos mínimos, o incluso evitar la misma como manera de
preservar y alargar la vida.
El Control Masculino de la
Eyaculación
Dado que un gran número de taoístas relacionan
la perdida de semen con la pérdida de fuerza vital, donde una perdida excesiva
de fluido conlleva un envejecimiento prematuro, enfermedades y fatiga general,
unos argumentan que nunca se debería eyacular, mientras que otros proveen una
serie de formulas especificas para determinar la cantidad máxima de
eyaculaciones para conservar la salud. La idea general es limitar la perdida de
fluidos tanto como se pueda con respecto a las relaciones que se mantengan. A
medida que estas prácticas sexuales fueron transmitiéndose generación tras
generación, se fue perdiendo la importancia del número de eyaculaciones. No
obstante, la retención de semen es uno de los pilares de la práctica sexual
Taoista.
Existen numerosos métodos de control
eyaculatorio prescritos por los taoístas. Para evitar la eyaculación, el hombre
tiene dos opciones. Puede retirarse inmediatamente antes del orgasmo, un método
bautizado por Joseph Needham como “Coitus Conservatus”, o puede aplicar presión
con sus dedos en una zona localizada entre el ano y el escroto que causa una
reversión de la eyaculación hacia la vejiga, método comúnmente conocido como
“inyaculacion”. Mientras que ahora se conoce que este segundo método causa una
“eyaculación retrograda”, los taoístas creían que el semen viajaría a través
del cuerpo hasta el cerebro para fortalecerlo y alimentarlo. Este método de
presión es llamado por algunos taoístas el método de “El Punto del Millón de
dólares” otro de los métodos que se puede utilizar es el de el entrenamiento en
la separación de la eyaculación y la contracción orgásmica (la contracción de
los músculos de la pelvis que incitan a la próstata a eyacular). Debido a la
separación de estos impulsos, en el momento del orgasmo, el hombre puede
detener la penetración pero permanecer dentro de su pareja y “cerrar” su suelo
pélvico mientras que adopta una intención derivada de la meditación que se cree
no re direccionaría el esperma, sino la energía vital Jing hacia la parte
trasera y el centro del cerebro. De esta manera, el hombre tendrá el orgasmo,
pero no eyaculara, es más, no perderá su erección. Esta fórmula, pretende que
el hombre escale una “escalera” de orgasmos ascendentes de manera conjunta con
la actitud meditativa para cultivar y almacenar una cantidad masiva de Jing. Si
se practica de manera correcta, el hombre no debería tener dolores
testiculares, ni semen en la orina, además de recibir los beneficios buscados
para su salud. Aquellos que practican este método argumentan que es uno de los
secretos para la inmortalidad.
Jing (Energía Sexual)
Otro de los conceptos importantes de la “Unión
de las Esencias” es que la unión de un hombre y una mujer resulta en la
creación del Jing, un tipo de energía sexual. Derivado del acto amatorio, se
crea el Jing, y el hombre puede transformar parte de este Jing en Qi, mejorando
e incrementando de esta forma su fuerza vital. Teniendo cuantas relaciones
sexuales sean posibles, el hombre tiene la oportunidad de transformar más Jing,
derivando en innumerables beneficios para su salud.
El Significado de la Mujer
Para los taoístas, el sexo no era una cuestión
exclusiva de generar placer para el hombre, la mujer también debía ser
estimulada y satisfecha para extraer todo el beneficio posible del encuentro
sexual. El sexo solo debería ser practicado si es deseado por ambos. Si se
practica el sexo de manera acordada, la mujer también generara Jing, y parte de
este será absorbido por el hombre para incrementar todavía más su Qi. La mujer
también ocupa una posición preeminente en el Ishinpo, siendo el tutor una
mujer. Una de las razones por las cuales las mujeres tenían una gran cantidad
de fuerza en el hecho sexual, era que acababan la relación sin ningún tipo de
“erosión”, debido al hecho de que son ellas las encargadas de crear vida, no
existiendo por tanto la necesidad de preocupación con respecto a la
eyaculación.
No obstante, a las mujeres se les asignaba un
lugar de inferioridad en la relación sexual. Muchos de los textos estudian el
hecho sexual desde el punto de vista masculino, y, por lo general, evitan
discutir como el sexo beneficia a la mujer. Se animaba a los hombres a no
limitarse a relaciones monógamas, y se les aconsejaba tener relaciones solo con
mujeres jóvenes y bellas que no hubieran tenido ningún vástago. Mientras que el
hombre tenía el deber de complacer a la mujer, esta no dejaba de ser más que un
mero objeto. De hecho, en un gran número de citas del Ishinpo, se identifica a
la mujer como al “enemigo”. Esto derivaba del hecho de que el acto sexual era
una asimilación de la superioridad masculina por parte de la mujer. En textos
sexuales posteriores, que datan de la Dinastía Ming, la mujer pierde todo tipo
de carácter humano, haciéndose referencia a la misma de manera frecuente con el
término “el otro”. De esta forma, la importancia de la mujer disminuyo con el
tiempo.
Las mujeres también eran consideradas como un
vehículo para la extensión de la vida del hombre, pero esto solo ocurría a raíz
de la absorción de la energía vital de la mujer (Jing y Qi). Algunos taoístas
llamaban al acto sexual la “batalla del robo y el fortalecimiento” Estos
métodos sexuales encuentran cierta correlación con métodos militares Taoístas,
en los cuales, en vez de asaltar los muros y puertas de las fortalezas, las
batallas eran una serie de fintas y maniobras destinadas a debilitar las
maniobras del enemigo.
Cuando y donde tener sexo
Otro escrito “Beneficios de la salud y el
dormitorio” indica que hay unos momentos más propicios para la copula que
otros. Una persona debería evitar copular cuando hay luna creciente o llena y
en días en los que hay fuertes vientos, lluvia, niebla, calor o frio, truenos,
relámpagos, oscuridad sobre la tierra y el cielo, eclipses lunares y solares,
arcoíris y terremotos. La copula en estas circunstancias dañarían el espíritu
del hombre y causarían la enfermedad en la mujer. Los hijos concebidos en estas
circunstancias serian locos, estúpidos, o tontos (mudos, sordos, ciegos,
impedidos y violentos).
También era de gran relevancia la elección del
día propicio para la copula si una persona deseaba engendrar un hijo. Después
de la menstruación femenina, los mejores días eran el primero, tercero y quinto
día. Si en estos días el hombre eyaculase después de la medianoche, el niño
sería probablemente masculino. Si se deseaba una niña, entonces el hombre debía
eyacular en el segundo, cuarto o sexto día después de la desaparición de la
menstruación.
Adicionalmente, también era de cierta
importancia el lugar donde se llevara a cabo la copula. Se debía evitar el
brillo del sol, la luna o las estrellas, el interior de los templos y sus
proximidades, los pozos, y las inmediaciones de tumbas o ataúdes.
Si se siguieran estas instrucciones, el bebe a
nacer sería bueno, sabio y virtuoso. Si no se tenían en cuenta, el bebe seria
malvado y la familia acabaría hallando la muerte.
Inmortalidad
Algunas sectas Taoístas de la Dinastía Ming
creían que una de las maneras de conseguir una extrema longevidad y hasta la inmortalidad
era la copulación con vírgenes, especialmente con vírgenes jóvenes. Esta
creencia ha sido criticada y censurada por parte de la mayoría de las escuelas
Taoístas como “Seudo-Ta” o “No-Tao”.
Algunos libros sexuales tales como e Hsuan wei
Hshin and Sang Fen Tan Cheueh, escritos respectivamente por Zhao Liangpi y
Zhang Sanfeng, denominan a la pareja femenina como Ding, originalmente una
caldera de bronce con tres patas utilizada en la práctica de la alquimia, y
explican que la Ding mas perfecta es una de 14, 15 o 16 años justo antes de su
primera menstruación. De hecho, incluso se avanzo en dicha área, llegándose a
dividir a Ding en tres grandes grupos:
El primer grupo o grupo más bajo, mujeres entre
21 y 25
El segundo grupo o grupo medio, mujeres vírgenes
con menstruación entre los 16 y los 20
El Tercer grupo o grupo más alto, mujeres de 14
años premenstruales
Todos estos preceptos, si seguidos, se creía,
por parte de algunas sectas, llegaban a proporcionar la inmortalidad.
De acuerdo con G Hong, un alquimista taoísta del Siglo IV “aquellos que
busquen la inmortalidad deben perfeccionar las esencias absolutas. Estas
consisten en la acumulación de Jing, la circulación del Qi y el consumo de la
gran medicina” Como es obvio en el texto, el primer precepto derivaba de la
observación sexual del Jing. Ge Hon, no obstante también explica que le parece
una tontería la creencia de que únicamente la práctica sexual puede acercarnos
a la inmortalidad, y que algunos de los antiguos mitos sobre las artes sexuales
se habían malinterpretado y exagerado. De hecho, las artes sexuales debían ser
practicadas de manera conjunta con la alquimia para alcanzar la inmortalidad.
Ge Hong también mencionaba que podían ser peligrosas si se practicaban de manera
incorrecta.
Epoca Actual
En nuestros dias, existe un gran movimiento en Occidente de aceptación de algunos métodos de la sexualidad taoista. En particular, el control de la eyaculacion ha ganado cierto peso debido a dos razones fundamentales;
Epoca Actual
En nuestros dias, existe un gran movimiento en Occidente de aceptación de algunos métodos de la sexualidad taoista. En particular, el control de la eyaculacion ha ganado cierto peso debido a dos razones fundamentales;
1) el
aumento de disfunciones sexuales derivadas del estres, la mala alimentación, la
falta de ejercicio, y en general la vida moderna, y
2) el reconocimiento
público por parte de ciertas celebridades del mundo del entretenimiento y el
deporte (el mas famoso es David Beckham) de la utilización y práctica habitual
de las tecnicas taoistas del control de la eyaculación en sus relaciones
sexuales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario